Con dos temporadas a sus espaldas, María Castro, la pelirroja más conocida de la televisión, es una de las veteranas de Sin tetas no hay paraíso. Tras muchas decepciones, Jessi ha encontrado el amor verdadero. La gallega disfruta con este cambio.
-¿Cómo estás viviendo la evolución de tu personaje?
-Estoy muy feliz. Me parece que Pablo Santana (Fernando Andina) conseguirá curar las heridas del corazón que le ocasionó El Duque.
-Entonces, ¿se terminarán las ardientes escenas de cama a las que nos tiene acostumbrados Jessi?
-No. En esta temporada seguimos teniendo sexo en la serie. Eso sí, creo que todo me toca a mí (risas).
-Estudiaste Magisterio, INEF, fuiste gimnasta profesional y has triunfando como actriz…
-Sí, era una espinita que siempre tuve clavada. Ahora me siento orgullosa de haber perseguido mi sueño y haberlo conseguido.
-Y ahora has empezado a cursar Periodismo, ¿no?
-Sí, me gusta estudiar y aprender cosas nuevas. Tal vez un día pueda dedicarme a esto.
-Enrique, tu novio, vive en Galicia. ¿Cómo llevas la distancia?
-Bien. Con él he encontrado el amor verdadero. Es una persona que me lo da todo, y yo a él; sería un error dejarlo escapar por culpa de los kilómetros.
-¿Ya hay planes de boda?
-No. Me casaré, pero ahora no es el momento. Eso sí, está claro que será con él y en Galicia. Y tendré muchos niños porque soy muy ‘mami’.
-¿Es cierto que has rechazado una obra de teatro por falta de tiempo?
-No, han sido dos. Me da una pena terrible, pues nunca lo he hecho y tengo muchas ganas.
-¿Echas de menos a Miguel Ángel Silvestre, tu compañero?
-Sí, y en todos los aspectos. Es un chico muy cariñoso y, además, grabamos secuencias muy buenas. De todas formas, esta producción es mucho más que El Duque.
-¿Crees que se podría dar un fenómeno parecido con alguien del actual elenco?
-Quién sabe. Creo que es difícil que se repita porque, a nivel social, todo el mundo lo conocía. ¡Era casi como Barack Obama!
Vía Teleprograma