Ha apoyado una campaña contra el cáncer de mama. “Por desgracia, mi familia está plagada de esta enfermedad, pero no tengo miedo, sino que tomo precauciones”, confiesa la gallega. María nos habla de su vida y de su éxito como actriz.
Está a punto de comenzar la cuarta temporada de ‘Tierra de Lobos’. ¿Qué tienes de loba?
Nada. Yo en el amor soy bastante corderito.
¿Un hombre te lleva por donde quiere?
Si me tratan bien y estoy enamorada, me entrego al amor. Pero no soy imbécil y sé cuándo me quieren merendar. Soy un poco meiga.
¿Cómo te va con tu chico, Leandro Rivera?
Bien, estoy feliz.
¿Qué sueño tienes?
Necesito ser madre, porque me encanta cuidar a los que tengo a mi alrededor.
¿Y casarte?
No me obsesiona.
Trabajaste en ‘Sin tetas no hay paraíso’. ¿Es para tanto El Duque?
El Duque y Miguel Ángel Silvestre son opuestos.
¿Pero tienen morbo?
Nunca me hubiese fijado en El Duque, un tipo duro, cruel, villano. Miguel Ángel es supercariñoso, generoso, buena persona, es como un osito y nos cuida un montón.
¿Te enamorarías de él?
Le quiero mucho, pero no. Me encanta que se quiera comer el mundo. Se merece lo mejor.
Hiciste un videoclip con Baute. ¿Te cogió porque estás muy bien o porque sabes mover la cadera…?
Será porque me muevo, aunque él sí que se mueve bien.
Has hecho gimnasia rítmica y has sido profesora de INEF. ¿Qué tiene de interpretación la gimnasia?
Mucho. Yo destacaba en expresión corporal. Con una música te contaba una historia.
¿Y de qué te ha servido?
Me ha ayudado a definir mi personalidad. Soy trabajadora, constante, exigente y cabezona. Pero sé perder.
¿Qué es lo que menos te gusta de ti?
Soy mi peor enemigo, no me perdono los fallos. A veces soy muy cruel.
¿Qué tipo de chico no soportas?
Los chulos, los prepotentes y los que humillan al otro. No aguanto la injusticia hacia los que quiero.
¿Encajas bien las críticas?
Las opiniones son como los culos: cada uno tiene el suyo.
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