¿Quién dijo que no tenían futuro? Cuando comenzaron su relación por sorpresa el verano de 2010 hubo quien no apostó mucho por esta pareja pero parece que el tiempo está dando la razón a su amor. La actriz y su novio vuelven a dejarse ver de lo más cariñosos, dejando atrás rumores sobre su distanciamiento. 
Se conocieron en una fiesta en Ibiza y la química entre ambos fue instantánea. Lo suyo empezó muy deprisa ya que poco después de empezar decidieron irse a vivir juntos una temporada a Nueva York, en donde Amaia aprovechó para mejorar su inglés y seguir formándose en interpretación.
Cuando regresaron ambos se distanciaron y los medios les perdieron la pista, motivo por el cual se comentó que lo suyo podría haber terminado.
Pero nada más lejos de la realidad. Amaia y Rosauro siguen juntos y muy felices. La edición online de la revista ¡Hola! ha cazado a la pareja disfrutando de un partido de baloncesto en el Palacio de los Deportes el pasado fin de semana y era la viva imagen del amor.
Como dos auténticos tortolitos se dedicaron mimos y caricias derrochando complicidad. En la apretadísima agenda de Amaia siempre hay un sitio para estar con el hombre que más quiere.
Era la imagen que prueba que lejos de haber roto, los dos están mejor que nunca y parece que lo suyo tiene mucho futuro
Se conocieron en una fiesta en Ibiza y la química entre ambos fue instantánea. Lo suyo empezó muy deprisa ya que poco después de empezar decidieron irse a vivir juntos una temporada a Nueva York, en donde Amaia aprovechó para mejorar su inglés y seguir formándose en interpretación.
Cuando regresaron ambos se distanciaron y los medios les perdieron la pista, motivo por el cual se comentó que lo suyo podría haber terminado.
Pero nada más lejos de la realidad. Amaia y Rosauro siguen juntos y muy felices. La edición online de la revista ¡Hola! ha cazado a la pareja disfrutando de un partido de baloncesto en el Palacio de los Deportes el pasado fin de semana y era la viva imagen del amor.
Como dos auténticos tortolitos se dedicaron mimos y caricias derrochando complicidad. En la apretadísima agenda de Amaia siempre hay un sitio para estar con el hombre que más quiere.
Era la imagen que prueba que lejos de haber roto, los dos están mejor que nunca y parece que lo suyo tiene mucho futuro
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