- Anatoly sospecha que la banda de El Duque está implicada en la muerte de Vladimir.
- Alberto anima a Cristina a ir al casting de un anuncio.
- Vanesa trata de empezar de cero trabajando de peluquera.
- Cortés es apartado del trato que Rafa mantiene con los rusos.
Catalina descubre, gracias a una equivocación de su cuñada Elena, que Cortés destina importantes donativos a una ONG. Pero la generosidad de su marido no es gratuita. A cambio de su buena acción, Íñigo Armada, presidente de la organización benéfico y miembro de la Agencia de Control del Estrecho, se ha comprometido a hacer la vista gorda a la entrada y salida de sus mercancías.
Inmediatamente, la joven va a contárselo a El Duque, que idea un plan para chantajear a Armada. Siguiendo las órdenes del narcotraficante, Agustín, El Pertur y Fidel, el camarero del club, entran en las instalaciones de la ONG para apoderarse de los discos duros que recogen toda la información de sus actividades ilegales.
Vanesa es despedida de la peluquería
Cuando sus hombres han cumplido la misión, Rafa se reúne con Íñigo en el bar de un hotel para informarlo de lo que tiene en su poder. “Si no me facilitas los datos que necesito sobre la vigilancia en el Estrecho, haré público en los medios que eres un funcionario corrupto”, amenaza.
Ignorando la advertencia, Armada acude a pedir ayuda a Cortés y este toma la determinación de matar a su rival. Así no se entrometerá más en sus negocios ni en su vida.
Mientras, Anatoly, animado por Martínez, pide un adelanto a su socio: “Te concedo tres días para que me des un tres por ciento más de lo que me prometiste, es decir, un millón de euros”. Para obtener el dinero en el plazo exigido, El Duque y sus hombres se embarcan en un nuevo negocio: el robo de coches de lujo. El primer paso será comprar el taller de Jesús.
Jessica se lleva una enorme decepción al encontrar por casualidad la carpeta con la información que Cata facilitó a Rafa. Comprendiendo que la pareja sigue viéndose a escondidas, decide abandonar al joven narco. “¿Por qué no puedes quererme a mí? ¿Cómo es posible que sigas enamorado de ella? Te traicionó una vez y volverá a hacerlo, idiota”. le recrimina antes de marcharse del loft en el que conviven.
Las esperanzas de Vanesa de tener una nueva vida se desvanecen cuando la despiden de la peluquería. “Cada vez hay menos clientes”, se justifica Rosa, la propietaria del establecimiento. Esta decepción acercará a la chica a la droga.
En casa, Fina tiene sus primeros roces de convivencia con Tomás.
Vía Telenovela