EL DUQUE, EL HOMBRE MÁS DESEADO

Vuelve. El hombre más atractivo de la televisión, Rafael Duque (Miguel Ángel Silvestre), regresa el 11 de septiembre. Sus fans, que se hacen llamar las “duquesitas”, están de enhorabuena ya que el actor apenas se ha dejado ver este verano.

Para calentar motores, Telecinco repone el día 4 el último capítulo de la primera temporada de “Sin tetas no hay paraíso”, un día después del macro-estreno en el Palacio de Deportes, de Madrid, de la segunda temporada de la serie, a la que asistirán 5.000 privilegiados.

Un verano sin amor
El actor, que ha tenido pocas y accidentadas vacaciones, está convencido de que las nuevas tramas “van a gustar mucho. Cada vez que leo el guión de un capítulo necesito leerme otro”.

Miguel Ángel pasó 96 horas (cuatro días) en Ibiza, varias de ellas en la sala de Urgencias del hospital de la isla, tras sufrir un accidente de moto, del que ya se encuentra recuperado. Ni el propio actor se imaginó el revuelo que iba a provocar su presencia en el centro. Pero, a pesar de las pasiones que levanta, él confiesa con rotundidad: “No he ligado este verano”.

Un verano que tampoco ha sido fructífero en el amor para otra de las protagonistas, Amaia Salamanca (Cata). La actriz acaba de romper su relación con el vocalista del grupo Pignoise, Álvaro Benito. Según fuentes cercanas a la pareja, habría sido Álvaro quien dejó a Amaia pensando que esta pequeña riña tendría reconciliación. Pero el sábado 30, sobre las siete de la tarde, la joven recogía sus pertenencias de la casa en la que convivía con Álvaro, a las afueras de Madrid.

La actriz, que se tomará noviembre como mes sabático tras pasar todo el verano trabajando, se apoya en estos momentos en el hombro de Mario Casas, a quien le une una amistad muy estrecha. Los jóvenes siguen rodando la película “Fuga de cerebros” y ambos se dieron a conocer en televisión con la serie “SMS” (La Sexta). Casualidades de la vida o no, Mario y Álvaro trabajan juntos en la serie “Los hombres de Paco” (Antena 3).

Una boda por despecho
Igual de movida que la vida real para Amaia será la nueva temporada de la serie, que fue el mejor estreno de la pasada temporada con una media de cuatro millones de espectadores.

Los nuevos episodios cuentan con un argumento digno de cualquier culebrón. Después de la supuesta muerte del hermano de Cata, llegará la celebración de una posible boda con unos protagonistas equivocados.

Cata podría aceptar casarse con Miguel Cortés, pero, una vez ante el altar, la dudas asaltarán a la joven. Ella se debate entre vivir rodeada de lujos y vengarse del Duque o vivir con un hombre al que no ama.

Nuevos acontecimientos influyen en su decisión final: la posibilidad de que El Duque se entregue a la policía colaborando con el inspector Torres y el testimonio de Vanesa, dispuesta a testificar en un juicio contra él.

Vía Revista Diez Minutos!